Albania

Albania se ha convertido, poco a poco, en uno de los destinos de moda del este de Europa. Algo que no es de extrañar si tenemos en cuenta el patrimonio histórico de sus ciudades y la belleza de sus parajes naturales. Además, cuenta con una gastronomía absolutamente deliciosa y con una oferta de alojamiento digna de mención. Dicho de otro modo, se trata de un país que merece una visita en profundidad por parte de cualquier amante de los viajes.

Qué ver en Albania

Este tour comienza en Berat, que probablemente es el destino turístico más popular de Albania. La ciudad ha sido catalogada por la UNESCO como Patrimonio de la Humanidad en su conjunto. Se sitúa a apenas dos horas en coche de la capital y tiene más de 2000 años de historia. Es conocida como “la ciudad de las 1000 ventanas” y, aunque carece de grandes monumentos, es un museo en sí misma. En sus proximidades está el cañón de Osum, uno de los parajes naturales más impresionantes del país.

Al igual que Berat, Gjirokastra es otra ciudad considerada como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Destaca por su arquitectura tradicional otomana y es llamada también “la ciudad de piedra”. Subir a su castillo y contemplar desde allí las imponentes vistas es algo obligado. Lo mismo sucede en las ruinas de Butrinto y Ksamil. Estas, además, se encuentran muy cerca de algunas de las mejores playas del país, las cuales llaman la atención por el intenso color turquesa de sus aguas. Basta con decir que la zona se conoce también como “la Riviera Albanesa”, por su parecido con la Riviera Maya.

Qué hacer en Albania

En Albania no faltan las actividades de ocio que se pueden realizar al aire libre. Por ejemplo, una de las experiencias más increíbles que ofrece el país es la de hacer rafting en el cañón de Osum citado anteriormente. Pero, además, el país cuenta con varias termas ubicadas en diferentes rincones. Las más conocidas de todas son las de Banjat e Benjës, que se sitúan dentro del Parque Nacional del Abeto de Hotova y muy cerca de la bella localidad de Përmet.

Por su parte, la costa del mar Jónico brinda a esta nación unas playas que nada tienen que envidiar a las más famosas del mundo. Cuenta con más de 100 kilómetros de litoral, dentro del cual destaca “la Riviera Albanesa”, en el condado de Vlorës. Las mejores son las de Kakome Beach, Lukove Beach y Borsh Beach, si bien es cierto que hay decenas dignas de pasar un día tumbado en una hamaca y disfrutando de refrescantes baños cada vez que apetezca.

Si se viaja hacia el interior del país es posible disfrutar, a muy pocos kilómetros de Fier, un conjunto arqueológico de valor incalculable. Se trata, cómo no, de la ciudad griega de Apollonia de Iliria. Su monumento más destacado es el Templo de Artemisa, del cual aún se conserva la parte frontal. Conocer la zona en profundidad puede llevar algo más de una hora.

Donde dormir

Las alternativas de alojamiento en Albania son muchas y muy variadas. De hecho, su oferta se ajusta a las necesidades de todo tipo de viajeros. Por ejemplo, quienes viajan en familia o con amigos tienen a su disposición una gran variedad de apartamentos turísticos en los que disfrutar de cocinas privadas, cuartos de baño independientes y un grado de confort similar al que tendrían en su propio hogar.

Una buena alternativa a este tipo de apartamentos la ofrecen los aparthoteles. En concreto, se trata de complejos que ofrecen viviendas a sus huéspedes, pero también servicios propios de un hotel. Sería el caso de piscinas al aire libre, centros de spa y bienestar o instalaciones deportivas, por ejemplo.

Como es obvio, nunca hay que dejar de lado la opción de quedarse en un hotel. Al fin y al cabo, este tipo de establecimientos brindan la posibilidad de despreocuparse de todo y centrarse solo en descansar. Una opción más económica pasa también por reservar en un hostal, tanto en una habitación privada como compartida. Siempre es aconsejable elegir uno en modalidad bed & breakfast, es decir, que incluya el desayuno.

Transporte

La forma más adecuada de ir a Albania es tomar un vuelo que desembarque directamente en el Aeropuerto de Tirana, su capital. Por ejemplo, desde España hay conexión entre Barcelona y Madrid con esta ciudad.

Una vez en su territorio, hay que buscar otras formas de moverse. Sin duda, el taxi o un servicio de transfer son las opciones ideales para llegar hasta el hotel, aparthotel u hostal en el que el viajero vaya a alojarse, pero también puede ser aconsejable alquilar un coche. Este tipo de vehículos brindan una gran libertad a la hora de explorar el país.

Por su lado, en las ciudades suele haber servicio de autobuses y de otros medios de transporte muy interesantes. En caso de querer viajar hasta las islas griegas, lo mejor es usar el ferry.

Otros datos de interés

Albania tiene su propia moneda. En concreto, se trata del “lek”, cuyo valor es muy inferior al euro. Aproximadamente, 1 euro es equivalente a 115 leks, aunque la tasa de cambio puede variar en cualquier momento. Esto hace, en gran medida, que sea un país bastante económico, sobre todo, para aquellos viajeros que proceden de la zona central y occidental de Europa. El huso horario entre España y esta nación es el mismo, a pesar de ser fronterizo con Grecia.