Canyamel

Canyamel se ha convertido, con el paso del tiempo, en uno de los complejos turísticos más famosos de la isla de Mallorca, Baleares. En concreto, se encuentra situado dentro del término municipal de Capdepera y es conocido por brindar tranquilidad, relax y lujo. De hecho, allí es posible disfrutar de infinidad de comodidades en forma de centros de spa, espectaculares piscinas al aire libre, etc. Además, se encuentra justo enfrente de algunas de las más bellas playas de toda la isla. Por este motivo, no es de extrañar que, cada año, lo visiten miles y miles de viajeros.

No cabe duda de que el principal atractivo turístico de Canyamel y lugar de obligada visita para cualquier viajero son las cuevas de Artà. Se ubica justo al lado del complejo y se pueden recorrer, siempre mediante la contratación de visitas guiadas, en barca. Están repletas de estalagmitas y estalactitas que conforman una estampa única. De hecho, poco tienen que envidiar a las famosas cuevas del Drach. Por su parte, la zona también es conocida por albergar multitud de playas y cuevas costeras que pueden conocerse libremente por parte de los apasionados del esnórquel y el submarinismo. Y, si no apetece tal actividad, siempre es posible disfrutar de ellas, simplemente, tomando el sol.

Como no podía ser de otro modo tratándose de un complejo turístico en Mallorca, en esta zona no hay lugar para el aburrimiento. En primer lugar, junto a sus instalaciones hay un campo de golf de 18 hoyos perfecto para los amantes de este deporte. Asimismo, también cuenta con multitud de pistas de tenis, lo cual probablemente es posible gracias al auge de este deporte en la isla y en el conjunto de las Baleares debido a que, en los últimos años, el archipiélago ha dado a dos de los mejores tenistas de la historia de España como son Carlos Moyá y, sobre todo, Rafa Nadal. Por su parte, Canyamel también dispone de una playa, galardonada con una Bandera Azul por la calidad de sus servicios, y de restos arqueológicos procedentes de la Edad del Bronce.

Evidentemente, la oferta de alojamiento del complejo turístico de Canyamel es muy amplia y variada. Gracias a ello, encontrar un hotel capaz de ofrecer todos los lujos que se puedan imaginar no es difícil. De hecho, apostar por uno que posea centro de spa, piscina al aire libre, servicio de desayunos y habitaciones para parejas y familias no es nada complejo. Sin embargo, aquellos que prefieran una opción más modesta siempre puede alojarse en un hostal de los alrededores. Tampoco hay que descartar, sobre todo si se viaja en grupo, la alternativa de reservar un apartamento vacacional. Este tipo de alojamientos brindan la posibilidad de disfrutar de mayores cotas de privacidad e independencia a la hora de disfrutar de la zona.

No hay duda de que, para llegar Canyamel, lo mejor es tomar un avión que lleve directamente hasta el Aeropuerto Internacional de Palma de Mallorca desde la ciudad de salida. Sus instalaciones reciben vuelos procedentes de multitud de destinos a nivel nacional y europeo, así que esta no es una tarea difícil. Una vez allí, hay varias alternativas. Probablemente, las más cómodas de todas sean subir a un taxi o, en su defecto, contratar un servicio de traslados que lleve directamente hasta su ubicación. Pero también es posible viajar hasta el centro de la capital y tomar un bus desde su estación de autobuses o alquilar un coche para recorrer la isla con más libertad.

Los orígenes de Canyamel datan del siglo XV, si bien es cierto que el primer auge de su población se experimentó por sus plantaciones de caña de azúcar durante el siglo XIX. A partir de la segunda mitad del siglo XX, gracias al auge del turismo europeo en Mallorca, este lugar se convirtió en lo que es hoy en día.