Información
Un alojamiento fantástico en Milán es el Hotel Virgilio, un establecimiento con un ambiente único donde disfrutar de una ciudad con un ambiente especial. Ocupa un edificio del siglo XIX en cuyo interior se pueden hoy día contemplar elementos del pasado, con toques elegantes y un salón de estilo clásico. Sus habitaciones están decoradas con un estilo clásico y elegante, donde los colores empleados en dar vida a estas estancias ayudan a crear espacios muy acogedores y cálidos que invitan al descanso y a la relajación. Están equipadas con camas confortables, muebles de madera, televisión con canales por vía satélite y aire acondicionado que permite que los huéspedes puedan elegir la temperatura que les resulte más agradable en todo momento. La conexión wifi está disponible en este establecimiento lo que hace posible que sus huéspedes puedan hacer uso de Internet en todo momento desde su propia habitación. Todas las mañanas se sirve un desayuno continental compuesto por cafés tradicionales italianos, pasteles, cruasanes recién horneados y capuchinos. En el bar del hotel los huéspedes podrán degustar todo tipo de licores típicos de la zona. Entre los servicios con los que cuenta para mejorar la estancia se pueden nombrar el servicio de conserjería, guarda-equipaje, mostrador de información turística, recepción abierta 24 horas, servicios infantiles, servicio de planchado, servicio de limpieza en seco, servicio de lavandería y alquiler de coches.
Opiniones
Opiniones
12 OpinionesLorena, viajó en
Getafe
Viaje de vacaciones en pareja
Se encuentra cerca de la estación de tren. Buena ubicación en cuanto a la cercanía de restaurantes y supermercados.
La atención por parte del personal, suficiente.
Instalaciones viejas y deterioradas. La habitación apestaba entre a tabaco y cerrado. De 5 enchufes tan solo funcionaba uno. Si enciendes la luz de la habitación no podrás tener a la misma vez encendida la del baño y al revés, y al encender la televisión mas de lo mismo, además de repente las luces se apagaban sin motivo aparente, y volvían pues a saber cuando. La cama no muy cómoda pero aceptable. El baño minúsculo, aunque esto es lo de menos. La alcachofa de la ducha era fija, y la misma ducha no tenia ni mampara ni cortina, ni nada que hiciese esta función, por ambos motivos el baño se ponía perdido de agua. El agua fría del lavabo no funcionaba, es mas el agua caliente no podías controlarlo, por lo que te abrasabas si necesitabas usar este saneamiento. La cisterna del inodoro no echaba suficiente agua para llevarse de manera óptima todos los residuos. La terraza de la habitación presentaba maceteros rotos y la tierra de los mismos esparramada por el suelo, las barandillas y biombos de la misma llena de cagadas de pájaros. Durante la noche, portazos, voces y otro tipo de ruidos en el pasillo del hotel, si se puede llamar así, y por la mañana temprano el niño de la habitación de al lado llorando. Por si fuese poco, nos picaron chinches.
Está claro que por el precio no se pueden exigir lujos, pero sí unas condiciones mínimas. Un autentica vergüenza. Para no volver ni recomendar. Es más para mandar una inspección.
Anónimo, viajó en
Viaja solo de vacaciones
Muy básico pero suficiente para pasar una noche a precio razonable y tener que coger el bus al aeropuerto desde estación central.
Anónimo, viajó en
Viaje de vacaciones en pareja
Habitaciones amplias pero antiguas y regular a nivel de limpieza. Trato decente por parte del personal, no se puede pedir más por este precio.
Anónimo, viajó en
Junto a la estación de trenes y bus. Lo unic o bueno.
Anónimo, viajó en
Hotel bastante escueto en cuanto a las instalaciones. El personal bastante desagradable. Buena localización (al lado de la estación de tren).
Anónimo, viajó en
En nuestra habitacion, no habia puerta ni cortina entre el dormitorio y el cuarto del baã±o, lo cual fue chocante. Recomiendo este hotel a los que no se fijan en detalles y/o que duermen una noche milan y se marchan al dia siguiente. Muy cerca de la centrale, caminando a cinco minutos.