Moverse por Tokio puede crear en el viajero verdaderos quebraderos de cabeza y es que su sistema de transporte no es nada fácil de primeras. Conviven en la misma ciudad el metro, el tren (líneas JR), las líneas privadas, los autobuses... Un lío. Así que hay que aplicar un poco de filosofía oriental y tener paciencia para entender cómo funciona la ciudad. Aquí van algunas ideas que os pueden ser muy útiles y os harán ahorrar mucho tiempo y esfuerzo.

Es muy recomendable comprar el billete Tokyo Free Kippu, que permite montar durante un día en todas la líneas de metro, tranvía, autobuses y líneas JR. Su precio es de 1.590 yenes para adultos y 800 para niños. Se puede adquirir en cualquier estación de JR o en las estaciones de metro principales. Si se quiere viajar por todo Japón se puede comprar el Japan Rail Pass para 7, 14, 21 días. Sólo está disponible para turistas y debe adquirirse fuera de Japón (así que deberéis llevarlos desde España). Con este billete se puede viajar en este medio a lo largo y ancho del país y también por los subterráneos de su capital.

Un consejo muy útil, sobre todo si tenéis claustrofobia, es que evitéis las horas puntas en Tokio porque esas imágenes que habréis visto en la televisión de señores con guantes empujando a viajeros para encajar en los vagones se hacen realidad en la capital nipona.

¿Qué medios de transporte usar en Tokio?

Tren

Es sin duda el mejor medio para moverse por Tokio y el favorito de los vecinos de la ciudad, tanto por su rapidez como frecuencia. Los trenes son puntuales por lo que será raro que se retrasen respecto al horario estipulado. Eso sí hay que saber que el tren se divide entre las líneas JR y las privadas.

La línea más útil para los viajeros es la JR Yamanote, ya que une los principales puntos turísticos de la ciudad. Así que si estáis pocos días os podréis apañar usándola sin problema. Es circular y para en las estaciones más grandes e importantes. Desde éstas podréis coger líneas privadas que van hacia el exterior de Tokio, en el caso que queráis ir a un lugar en concreto. La línea tiene un recorrido de 35 kilómetros y se puede dar la vuelta completa a la ciudad en algo más de una hora. Por si fuera poco encontraréis mapas e indicaciones en inglés, cosa que os facilitará mucho cada trayecto.

Una de las paradas en las que tenéis que bajar es en la de Shinjuku, la estación de tren más transitada del mundo con más de 3,5 millones de viajeros al día. Es una experiencia en sí.

Metro

Complementario a la líneas JR está el metro de Tokio, uno de los más eficaces del mundo, con tiempos de espera muy cortos. Puede presumir también de ser uno de los más limpios. Como con el tren, hay que estar atento porque existen dos compañías de metro el Tokyo Metro y el Toei. Es más complicado que el tren, pero llega hasta más lejos como a Roppongi.

Al ver el plano de las líneas de metro creeréis que tendréis delante el mapa que os llevará a descubrir el Arca de la Alianza, pero tranquilos, que con un poco de estudio, lo podréis descifrar. Tiene 13 líneas diferentes y cuenta con más de 230 estaciones repartidas por la ciudad. Si sólo vais a coger metro os puede interesar haceros con un Tokyo Subway Ticket, los hay de 24, 48 y 72 horas.

Para que os sea más sencillo, os recomendamos que os descarguéis Tokyo Subway Navigation for Tourists , una aplicación móvil que funciona sin conexión y que está en inglés. Disponible para Android e iOS.

Autobús

Es difícil, pero a veces es más tranquilo ya que van menos pasajeros. Si tenéis dudas de si el autobús os lleva donde queréis preguntad al conductor (un papel con el nombre escrito en japonés de vuestro destino es una buena idea). La compañía principal de autobuses es Toei y cuenta con el Tokyo Shitmachi Bus, un bus que va por los principales puntos de interés turísticos. Su frecuencia es cada 20 minutos aproximadamente y circula los fines de semana y los días festivos.

Taxi

Si estáis muy perdidos y no sabéis cómo llegar a destino siempre queda la opción del taxi, eso sí, tendréis que saber que en Tokio los taxis no son baratos, y a partir de las 23:00 se aplican tarifas nocturnas que lo encarecen más. Por eso no es un medio muy usado y es complicado encontrarlos por la calle. Se pueden coger tanto en estaciones de taxi como en la propia calle.