Consejos para viajar con mucho calor
A veces en nuestros viajes se cuela un invitado no deseado: el calor. Viajar en los meses de julio y agosto puede significar que durante nuestra estancia vamos a sudar, así que hay que ir preparados con planes y con un buen equipo para no terminar con una lipotimia que nos fastidie las vacaciones.
Aquí van algunos consejos que os pueden servir para soportar mejor las altas temperaturas.
Consultar el tiempo
Antes de partir es muy aconsejable visitar la página oficial de la AEMET para conocer las previsiones meteorológicas del destino. No son exactas, pero nos darán una idea de qué días van a ser los más calurosos.
Para esas jornadas se pueden programar actividades en las que la exposición al aire libre sea menor. Es decir, los días de más calor, un museo con aire acondicionado, un acuario o una catedral son los mejores destinos para pasar una jornada lejos del sol.
Preparar una maleta muy completa
Si el calor os acompaña durante el viaje, deberéis meter en la maleta más ropa de lo normal, ya que probablemente os cambiéis varias veces al día. Llevad camisetas finitas y fresquitas, así como pantalones o faldas cortas.
No olvidéis de meter unas sandalias cómodas para andar. Así el pie respirará. Aquí te dejamos varios consejos a la hora de hacer una maleta.
Hotel céntrico
Lo más normal es que durante el día sudéis, ya que será inevitable ir a lugares donde el sol os alcance. Por eso coger un hotel céntrico es esencial. Podréis ir a media tarde a daros una ducha para refrescaros.
Además es aconsejable que el hotel disponga de aire acondicionado en las habitaciones y si es posible que se pueda programar para que la estancia esté fresquita cuando lleguéis. Y si además, el establecimiento dispone de piscina, un buen chapuzón os alegrará el día.
Crema solar y gorras
La crema solar os puede salvar de unas quemaduras peligrosas. No escatiméis y comprad una buena protección. El sol os dará en todas las partes del cuerpo por lo que echaros crema de manera constante a lo largo del día.
Igualmente, llevad algo para cubrir vuestra cabeza. Una gorra, un pañuelo, un sombrero… Lo agradeceréis.
También puede ser una buena idea llevar un paraguas por si hay que hacer fila al sol para entrar a algún monumento. Con uno plegable en el bolso, será suficiente.
Parad las veces necesarias
No por ver todo, el viaje va a ser mejor. Así que descansad y sentaros en las terrazas locales para disfrutar de un turismo más relajado. Tomad fuerzas con una limonada bien fresca o con una cerveza.
Si hace demasiado calor, optar por entrar en bares con aire acondicionado. Igualmente, llevad agua encima.
Lo mejor es que vayáis comprando para que esté fresca y no sea una sopa que encima pese en el bolso.