Mochilero por Europa… en Invierno o en Verano

Si se viaja por Europa con poco dinero, con una mochila, pocas ganas de encontrarse con problemas y posibilidades de disfrutar de cosas a precios económicos, lo primero que habrá que tener en cuenta es la época del año en la que se viaja: la primavera (el final) y el verano. Entonces, por ejemplo, se podrá llevar menos ropa en la mochila; gastar menos en transportes, puesto que el buen clima invitará a caminar más; y se podrá asistir a conciertos y festivales en directo que, a veces son gratuitos u ofrecen actividades gratuitas. Claro que, también habría que valorar que en invierno u otoño los precios serán más baratos, habrá menos aglomeraciones –en verano, por ejemplo, el cupo de billetes que las compañías ferroviarias reservan para Interrail puede coparse- y, en algunos casos, la nieve añade encanto.

Pensando y valorando quizás haya que llegar a la conclusión de que el mal tiempo ahorrará más gastos al mochilero (aunque incrementará algunos, como queda dicho). Y es que, aún sin sol, las atracciones turísticas siguen existiendo, las diversiones también y en algunos lugares se añaden otras como la nieve. En lo referente al alojamiento, los servicios son aún de mejor calidad, porque hay menos personas. Y, además, sigue habiendo otros mochileros con los cuales compartir experiencias.

Ah!… y tener claro siempre que ni Europa es sólo Paris, Londres, Roma y Praga… ni los países son sólo sus capitales. Atrévete a descubrir otros lugares… aunque sea en invierno. También te saldrá a cuenta.