Planes alternativos en Andorra para los no esquiadores
Andorra en invierno se convierte en un polo de atracción de esquiadores y es que nuestro país vecino tiene una amplia oferta de estaciones de esquí con numerosas propuestas muy interesantes. No obstante, Andorra es algo más que nieve, por eso os hemos preparado algunas sugerencias para aquellos que no quieren ponerse unos esquís, pero que sí desean disfrutar del Principado de Andorra. ¿Preparados para viajar a Andorra y gozar al máximo aunque no te guste esquiar?
Patinar sobre hielo en Andorra
Una actividad muy divertida para toda la familia es patinar sobre hielo. Aunque para los menos habilidosos puede suponer un suplicio, ponerse unos patines y lanzarse a deslizarse por el hielo es muy entretenido. Para patinar hay que ir hasta el Palacio de Hielo de Andorra, que cuenta con una pista olímpica de 1800 metros cuadrados. Allí alquilan el material necesario (patines, cascos, coderas y rodilleras). Durante el día se puede patinar normalmente, pero dependiendo del día de la semana que sea, también hay sesión nocturna con música y luces, una experiencia muy divertida. Igualmente hay sesiones infantiles los sábados y domingos por la tarde con quads eléctricos y kartings de gasolina infantiles que se deslizan por el hielo. Además hay otras actividades para adultos como kárting sobre hielo, apto sólo para los más valientes y que consiste en series individuales de 10 minutos en circuito marcado dentro de la pista de hielo.
Visitar Museos curiosos
Andorra es una tierra de tradiciones, pero también de modernidad. Por eso os proponemos la visita a tres museos diferentes. ¿Cuáles? El Museo de la Moto, el Museo de Automóvil y el Museo del Tabaco. El primero se localiza en Canillo y es un homenaje a este vehículo de dos ruedas. Se pueden descubrir ejemplos de motocicletas de lo más singular y representativo desde principios del siglo XX hasta la actualidad. El segundo, el Museo del Automóvil, se ubica en Encamp y hace un recorrido desde la aparición de la máquina de vapor Pinette en 1885 hasta la segunda mitad del siglo XX. Se considera como una de las colecciones más importantes de Europa, ya que además de 80 coches, 70 motos y 100 bicicletas se complementa con numerosos objetos como accesorios, miniaturas, pósteres… Por último, otro museo curioso es el Museo del Tabaco en Sant Julià de Lória. Ocupa la antigua Fábrica de Tabacos Reig, un edificio con historia. Allí descubriréis gracias a un sistema multimedia que os guiará por la fábrica cómo se hace el tabaco y todo el proceso posterior para su venta.
Dormir en un hotel iglú en Andorra
Aunque no os apetezca esquiar, eso no significa que no os guste el hielo y la nieve. Por eso este hotel es una manera original de pasar una noche en Andorra. El Hotel Iglú Grandvalira es un establecimiento efímero por lo que sólo se puede usar durante los meses de nieve, por eso es una buena idea reservar con tiempo, ya que las plazas son limitadas. Cada año es diferente, así que se puede repetir año tras años para descubrir algo nuevo. Sus huéspedes destacan que, a pesar de estar hecho de hielo, no se pasa frío en su interior. No obstante, no os olvidéis el pijama.
Visitar el único campanario redondo de estilo lombardo de Andorra
La Iglesia de Santa Coloma es un ejemplo del Románico que se puede visitar en Andorra. Este país presenta una atractiva ruta a través de sus iglesias para viajar hasta la Edad Media. Una de ellas es la Iglesia de Santa Coloma que tiene la peculiaridad de poseer el único campanario redondo de estilo lombardo del país. Este mide 18 metros y es bastante peculiar. Se añadió al templo en el siglo XII. Dentro, la iglesia albergaba una rica muestra de pinturas murales románicas elaboradas por el Maestro de Santa Coloma. En la actualidad sólo queda el Agnus Dei y decoración geométrica. Ya que visitáis Santa Coloma, no dejéis de dar una vuelta por la localidad ya que descubriréis lugares como la Torre dels Russos, una construcción modernista hecha con granito de Andorra.
Vivir la aventura en el Airtek de Naturlandia, en Andorra
Para los que no pueden estar quietos y les gusta la adrenalina, el Airtekk de Naturlandia es un reto al que tienen que enfrentarse si ponen el pie en Andorra. Y es que este parque pondrá a prueba su equilibrio con el mayor Sky Trail de Europa. Es un circuito aéreo de 13, 5 metros de altura, en el que hay que superar 54 obstáculos de diferente dificultad. Eso sí, podréis estar tranquilos, porque la seguridad está garantizada gracias al arnés y la guía de seguridad. La actividad acaba con un nuevo reto: lanzarse en tirolina. Ésta mide casi 180 metros, así que hay que echarle agallas para subirse a ella porque se sobrevolará algunas de las actividades de la cota 1.600 de Naturlandia. Podrán subirse niños que superen el 1, 20 de altura y deberán ir acompañados de un adulto.También podrás reservar hoteles cerca de Naturlandia para disfrutar más cómodamente de estas actividades.
Desconectar en Caldea
Caldea es un indispensable de Andorra, y es que el centro termoludico Caldea es un paraíso del descanso que desde que abrió sus puertas en 1994 no ha dejado de mejorar para dar el mejor servicio a sus clientes. Con más de 30.000 metros cuadrados tiene cabida para todo. Abre todos los días en horario de 10:00 a 22:00, aunque los sábados amplía su apertura hasta las 00:00. Dentro hay mucho que elegir. Uno de sus espacios más modernos es Likids, un spa para los más pequeños de la casa, pensado para menores entre 3 y 8 años. Dispone de visitas a la laguna central de Caldea y cuenta con una zona acuática, espacio para talleres y área de relax. Y por supuesto siempre están vigilados por un grupo de técnicos wellness. Así podréis dejar a los niños para disfrutar de otros espacios como la gran laguna interior, los baños indorromanos o la laguna exterior con vistas a la montaña. Una experiencia de relax.
Comprar en Andorra
Otro clásico que se relaciona con Andorra son las compras. Así que va a cerrar nuestra lista de propuestas. Hay que aprovechar que no disponen de los mismos impuestos que en España para hacernos con aquellas prendas de montaña y deporte o otros productos que necesitamos. No nos ahorraremos una millonada, pero sí unos cuantos euros. Para comprar además de los Centros Comerciales, lo mejor es ir hasta Andorra la Vella y recorrer la Avenida Meritxell. También se puede ir hasta las parroquias de Escaldes-Engordany y Ordino. La cuestión, como en todas partes, es mirar y comparar hasta encontrar el mejor precio. Y por supuesto, preguntar en el hotel, a ver qué tienda os recomiendan para lo que buscáis. Un consejo es conocer el precio del producto en España, así sabréis cuánto más barato es y si merece realmente la pena.