​Cabo Verde

​Cabo Verde es una de esas islas paradisíacas auténticas en las que la vida adquiere todo su esplendor y la belleza recorre cada poro del cuerpo. Conocida como la isla de la felicidad, destaca por sus playas espectaculares, su poblaciones carismáticas y su esplendorosa naturaleza.

Este país se localiza en África, frente a Senegal, y está formado por un conjunto de 15 islas, de las cuales 9 se encuentran habitadas. La temperatura es, durante todo el año, agradable: entre los 23 y los 30 ºC de día y los 18 y los 24 de noche. El idioma oficial es el portugués, ya que fue colonia de este país hasta 1975.

Qué ver en Cabo Verde

Este atractivo rincón del planeta combina playas espectaculares y enclaves montañosos carismáticos. Una visita imprescindible es Isla de Sal, la cual resulta completamente diferente a lo que inicialmente se espera. En realidad es un trozo de desierto isleño salpicado de hoteles y con una ciudad bellísima, Santa María, la cual destaca por sus coloridas casas de una sola planta.

La Isla de Sao Vicente es una de las más populares y turísticas. En ella suena la música, fluye la artesanía y la fiesta se vive a diario. También Mindelo es un lugar de ambiente imprescindible, una ciudad dinámica, divertida y musical que entra por los ojos. Isla Brava, y en especial Faja de Agua, Cachaço, Santiago, la capital Boavista, Alto Mira, el volcán Pico de Fogo y el cráter de Cova son enclaves que nadie debería dejar de fotografiar en este destino.

Qué hacer en Cabo Verde

Este paraíso africano es perfecto para tumbarse en una playa maravillosa o practicar todo tipo de deportes náuticos. Saltar de una isla a otra, disfrutando de los trayectos en barco y visitando los pueblos tradicionales de cada una de ellas, es una auténtica experiencia. Para muchos, este país es la sonrisa de África. La amabilidad, la hospitalidad, el ritmo y la alegría forman parte principal del ADN de sus nativos que, gracias al mestizaje de colonos europeos y esclavos africanos, suelen ser muy guapos.

Mezclarse con la población, acortar distancias y divertirse con ellos, disfrutar de la música autóctona (la morna, el zouk, el kuduro, la coladeira...) y dejarse seducir por el encanto de las noches, siempre animadas, son actividades esenciales en cualquier viaje memorable a Cabo Verde.

Dónde dormir

La variedad es un rasgo diferencial y positivo de los alojamientos en Cabo Verde. Estas islas incluyen multitud de alternativas: desde el típico hotel resort de estilo internacional rodeado de un complejo fastuoso hasta cualquier hostal acogedor, funcional y asequible con vistas deliciosas a la playa. También existen casas, villas y mansiones de lujo, estudios y apartamentos, aparthoteles y hogares particulares que alquilan sus habitaciones como alojamiento.

Transporte

La mayoría de los turistas llegan a Cabo Verde en avión. Resulta curioso que el aeropuerto de Isla de Sal es mayor que el de la capital del país, Boavista. Para moverse entre las islas lo mejor son las barcos, que no siempre son puntuales ni rápidos, pero constituyen una opción asequible y atractiva. Se corre el riesgo, eso sí, de que el Atlántico se muestre antipático y el viaje se convierta en una auténtica aventura. Por supuesto, también existe la posibilidad de usar vuelos nacionales, aunque no es posible entre todas ellas. Para desplazarse por el interior de las islas, alquilar un coche y, sobre todo, regatear con los taxistas son las mejores opciones.

Otros datos de interés

La gastronomía caboverdiana combina los sabores africanos con los portugueses. El plato típico es la cachupa, que consiste en un puré de maíz y muchos ingredientes. Las frutas tropicales y la feijoada son manjares deliciosos en este país que exige a los españoles contar con un visado para 6 meses.