Hong Kong

Esta ciudad china es actualmente uno de los principales centros financieros del mundo. Posee una elevada densidad de población y un encanto mágico fruto de la combinación de la tradición china y la influencia colonial que la han convertido en un mosaico de contrastes donde pobreza y riqueza, oriente y occidente, luz y penumbra se dan la mano para ofrecer un espectáculo digno de ver.

Hong Kong forma parte de la República Popular China y durante una parte de su historia fue una colonia británica. Posteriormente fue ocupada por Japón durante la Segunda Guerra Mundial para pasar nuevamente a manos británicas en el año 1945. La presencia británica en sus tierras ha dotado a esta ciudad de una esencia occidental mucho más marcada que en otras zonas de China. Pero también se mantienen ciertas tradiciones que en otros lugares han sido enterradas por el paso del tiempo. Este es el caso del idioma. Mientras que en el resto del continente chino se habla mandarín, en esta ciudad se emplea el cantonés.

Una ciudad moderna, cargada de historia, con infinidad de opciones de ocio y cultura para disfrutar de una estancia inolvidable.

Qué ver en esta ciudad

Hong Kong posee una gran cantidad de lugares para visitar. Uno de los más recomendados es el Victoria´s Peak, la cumbre más alta de la ciudad desde donde se pueden contemplar unas vistas panorámicas de la ciudad que dejan a los turistas sin aliento.

En la zona oeste de la ciudad se encuentra uno de los barrios más auténticos, el Sheung Wan, un lugar muy recomendado para pasear y dejarse llevar por la tradición de esta ciudad, por su cultura y por ese algo que hacen de esta ciudad de China un pequeño tesoro por explorar. En esta zona los comerciantes están aun agrupados por gremios, ofreciendo una visión al pasado única. Allí se encuentra el Man Mo Temple, uno de los templos más antiguos e importantes de la ciudad. Un centro de culto y devoción donde la mezcla de colores vivos, los aromas de las espirales de incienso y el silencio que reina en él lo convierten en un lugar sorprendente.

También pueden encontrarse templos mucho más animados como es el caso del Wong Tai Sin Temple ubicado en el centro de Kowloon. Constituye un centro de veneración al dios de la buena fortuna y la curación, por lo que la afluencia de fieles es muy elevada. En su interior se pueden contemplar tejados cubiertos de azulejos amarillos, pilares rojos y relieves de dragones dorados, un espectáculo digno de ver.

Qué hacer en esta ciudad

Muchas son las actividades que se pueden realizar en esta ciudad china, pero una de las que permite zambullirse de lleno en sus tradiciones y costumbres es visitar el mercadillo situado en el pueblo costero de Stanley. Además, este pueblo posee una playa de gran belleza, aunque no es recomendable bañarse en ella ya que está plagada de tiburones.

En la parte alta de la ciudad conocida con el nombre de Mid Levels existen bosques frondosos a los que se puede llegar desde diversas escaleras mecánicas situadas al aire libre. Estos bosques son el escenario ideal para practicar un poco de senderismo en tierras orientales.

Dónde dormir

Para alojarse en esta ciudad China existen diversas opciones. Pese a que en general no es una ciudad barata, pueden encontrarse opciones interesantes. Para encontrar un buen hotel la zona de Tsim Sha Tsui resulta muy recomendable ya que allí se encuentra la mayor densidad de este tipo de alojamiento. Además, está muy bien situada, cerca de los principales atractivos turísticos de la ciudad. Si se opta por hacer uso de un hostal lo mejor es hacer uso de la famosa Chungking Mansion en Kowloon, una zona con varios edificios de apartamentos que ofrecen alojamientos baratos.

Transporte

Desde el aeropuerto de la ciudad la forma más sencilla para llegar al centro es utilizar el metro. Realizando los transbordos oportunos se puede llegar a casi cualquier destino.

Esta ciudad de China cuenta con una red de transporte público única, compuesta por metro, tranvías, autobuses, minibuses, taxis y ferris que dan cobertura a los más de 11 millones de desplazamientos diarios que tienen lugar en ella. Los medios de transporte más populares son el metro y el ferry.

Otros datos de interés

Una experiencia que merece la pena vivir es cenar en uno de los puestos callejeros de la calle Temple. Allí se pueden degustar los cangrejos picantes, un plato que recuerda al fuego en cada bocado y que puede acompañarse por las cervezas de un tamaño considerable que ayudan a apagar las llamas en la lengua.