San Gil

​El municipio colombiano de San Gil, capital del departamento de Santander, atrae una gran cantidad de visitantes todos los años. Se encuentra al noreste del país, a 300 kilómetros de Bogotá. Está rodeado de hermosos paisajes naturales salpicados de montañas, quebradas y ríos, que lo convierten en un destino perfecto para los apasionados por el turismo activo. Las primeras poblaciones del lugar se asentaron en el siglo XVI, y su fundación como villa se estableció el 17 de marzo de 1689.

Qué ver en San Gil

La ciudad es muy pintoresca y se caracteriza por sus casas bajas y simples, con cubiertas de tejas, y sus calles empinadas revestidas de losas de piedra. En algunos sitios, en lugar de aceras hay escaleras. Es un placer descansar en la Plaza Mayor, rodeada de bares donde se puede saborear el delicioso café colombiano y también, por supuesto, bailar. Hay pocas construcciones históricas, y entre ellas destaca la catedral de Santa Cruz, de estilo colonial. Entre los atractivos del pueblo y los alrededores se incluye el parque El Gallineral, donde se aprecia el típico musgo en forma de barbas que cuelga de sus árboles, los ríos que forman bellas pozas, la piscina y los bonitos senderos ecológicos. También es precioso el parque nacional de Chicamocha, donde viven diversos animales, principalmente las cabras y avestruces, y se puede contemplar el cañón del río desde un teleférico.

Qué hacer en San Gil

La actividad por excelencia en San Gil es la práctica del rafting. Se puede practicar en el río Fonce, por ejemplo. Los senderos, ríos y caídas de agua también permiten disfrutar de una amplia variedad de deportes de aventura, como barranquismo, rápel, escalada, senderismo, parapente, kayak, natación en piscinas naturales y eliminar el relax contemplando unos paisajes excepcionales.

Alternativas de alojamiento en San Gil

Los hoteles, hostales y complejos de apartamentos de San Gil se concentran, principalmente, en la zona céntrica. Hay varios hostales y casas de huéspedes cercanos al río Fonce de atmósfera tranquila y encantadora. Varios hostales ofrecen habitaciones con baño privado en espacios decorados en un estilo rústico y tradicional, además de un trato cercano y familiar característico de Colombia. Los viajeros más exigentes pueden optar por alojamientos más elegantes, como son los hoteles de 3 y de 4 estrellas que disponen de piscina, spa, gimnasio, sauna y parques para niños. La mayoría ofrecen acceso a conexión Wifi y muchos de ellos aceptan el alojamiento de huéspedes con mascotas.

Cómo llegar y moverse por San Gil

La manera de llegar a esta localidad es por vía terrestre. Desde Bogotá se llega en unas 7 horas, desde Tunja en 4 horas y desde Bucaramanga el viaje en coche dura unas 3 horas. Quienes llegan por medio del aeropuerto de Palonegro, situado en Bucaramanga, pueden alquilar un coche en la misma terminal y conducir hacia el sur por la carretera 45 A, para llegar a destino en menos de 3 horas.

Otros datos de interés para organizar el viaje

Al preparar las maletas para viajar a esta localidad de Colombia es conveniente saber que el clima de la zona es templado, con temperaturas que oscilan entre 17 °C y 24 °C, menos en las zonas altas, donde bajan significativamente. La moneda del país es el peso colombiano. Es necesario beber agua embotellada y preparar los equipos para aprovechar las múltiples actividades en la naturaleza que se pueden disfrutar en la región, muchas de ellas adecuadas para compartir con niños. La gastronomía de Santander es muy variada, e incluye platos preparados en base a diversas carnes, legumbres y verduras. También se comen las famosas hormigas culonas y el mute, una sopa elaborada con maíz.