Costa de Valencia - montaña y mar

La provincia de Valencia tiene más de 130 kilómetros de costa. A esa franja litoral se le ha asignado como denominación turística el nombre de Costa de Valencia. En ella se incluyen las ciudades que se encuentran entre Sagunto al norte y Oliva en el extremo sur. La capital, Valencia ocupa un lugar destacado de una costa que se caracteriza por ofrecer unas playas extensas, con arenas suaves y aguas tranquilas, fáciles para caminar y plantar la sombrilla. Con hoteles en primera línea en casi todas las localidades. Una buena parte de las playas de la costa de Valencia están calificadas con la bandera azul europea que reconoce la calidad de los servicios que se ofrecen y de sus aguas. Esta distinción va acompañada de numerosas ofertas para el turismo de todos los gustos. Es una costa llena de historia y de patrimonio, con tantos lugares dignos de conocer y visitar que se requieren varios viajes o estancias largas en los hoteles de la zona para hacerse cargo de su riqueza. Los palacios como el de los duques de Gandía, los teatros como el de Sagunto, restos de historia desde antes de los romanos hasta las más modernas edificaciones como la Ciudad de las Artes y las Ciencias dotan a la costa de Valencia de un innumerable conjunto de lugares para disfrutar y aprender. Los hoteles de la costa de Valencia permiten al turista elegir entre ubicaciones plenamente urbanas con destino en la propia capital del Turia, como otras más alejadas del bullicio. Aunque si algo caracteriza a esta zona del Mediterráneo es la vitalidad y la alegría. Son elementos que se combinan de mil maneras. Destacan las Fallas. Son unas fiestas con proyección internacional absoluta, llenan la ciudad y sus hoteles. Para esas fechas siempre hay que reservar con antelación. Las Fallas son un acontecimiento único y singular. Atraen a numerosos visitantes que quieren disfrutar de la creatividad y de la magia del fuego, pero también de la explosión y del ruido de la pólvora. Además, la capital de la costa de Valencia también tiene un enorme atractivo para quienes quieren gozar de la música, del legado artístico depositado en edificios como la catedral, el casco antiguo… o de espacios más modernos como el Oceanografic, uno de los acuarios más grandes de Europa. Si algo caracteriza a todas las localidades de la costa de Valencia es su luz. Una luminosidad que quedó grabada en los cuadros de Sorolla, mostrando la intensidad de colores de la tierra y del mar. Pero también la pasión y la forma de ser de sus gentes, son otro elemento más a tener en cuenta. Parece que todavía se pueden entrever, entre Cañas y barro, los argumentos de las novelas de Blasco Ibáñez dejándose sentir por los rincones de la Albufera. Desde 1986 la Albufera se ha convertido en parque natural, — con el pueblo de El Perelló enclavado en el propio parque — a poco más de 25 km de la capital. Es una zona protegida donde la naturaleza mediterránea se muestra en todos su esplendor. Tiene un gran valor ecológico y paisajístico. Siguiendo hacia el sur se encuentra Cullera, una ciudad típica de playa, dentro de la comarca de la Ribera Baja. Cuenta con hoteles de distintas categorías. Está rebosante de turistas en verano, mucho más tranquila el resto del año. Con un clima agradable y benigno. Las huertas, los arrozales, los naranjos y olivos se distribuyen en sus alrededores. Desde su castillo situado en la montaña se puede ver toda la bahía de Cullera. Más al sur, se encuentra Gandía, es la capital de la comarca de La Sabor. Una ciudad de una gran riqueza y dinamismo económico. Es una de las ciudades pioneras en el turismo de playa. De hecho, las playas de Gandía siguen siendo uno de los referentes en el turismo familiar veraniego con una gran variedad de servicios y de prestaciones para quienes quieren disfrutar de unos de días de sol y playa o de quienes prefieren entretenerse con actividades de vela o subacuáticas. En los hoteles y restaurantes de la costa de Valencia, la oferta gastronómica es de las más suculentas de España. Destaca por encima de todo la variedad de paellas de arroz que se pueden probar, desde la huertana, marinera, etc… junto con innumerables guisos con pescados, marisco y verduras.