Hotel La Petite Bohême

Información

La Petite Bohême (ex La Petite Verneda) está situado en un marco de incomparable atractivo paisajístico en la localidad de Casau, en un enclave rodeado de montañas y con unas vistas privilegiadas sobre Vielha y Baqueira. Su localización, al norte de la provincia de Lleida y próximo a la frontera con Francia, ofrece a las visitas un entorno único, tanto por su importancia arquitectónica de confluencia de estilos como por ser escenario de multitud de actividades por la naturaleza como el esquí, rafting, kayak, barranquismo o rutas a caballo, entre otras. El alojamiento se caracteriza por su apacible atmósfera, su tranquilidad y un trato cercano que asegura disfrutar al máximo de las ventajas de su ambiente acogedor y de las recomendaciones acerca de los lugares de visita obligada de un patrimonio que reúne buena gastronomía, tradiciones y excursiones culturales. El restaurante se basa en platos de la gastronomía típica aranesa y en su en comedor se puede disfrutar de variados y nutritivos desayunos como su popular Olla, así como de un servicio de comidas y cenas que conseguirá sorprender a los paladares más exigentes. El espacio que ocupa su salón con chimenea permite, no solo relajarse en la mejor compañía, sino también poder degustar un aperitivo o una copa de vino gracias al bar que lo integra. El alojamiento ofrece la posibilidad de hacer uso de sus instalaciones para grupos o para llevar a cabo reuniones o cualquier tipo de evento. Las habitaciones conforman elegantes espacios donde predomina la madera y perfectos para encontrar todo el descanso y convertir la estancia en un momento inolvidable.

Ubicación

El establecimiento se ubica en Casau, a poca distancia de Vielha y de las pistas de esquí de Baqueira-Beret, donde los amantes de este deporte tienen la oportunidad de hacer uso de uno de los complejos más populares de Europa. Las actividades de invierno también destacan entre una oferta como trineos con perros, raquetas de nieve o snowboard. La iglesia de la localidad, dedicada a Sant Andreu, se considera un rincón de obligada visita, así como Aran Park, donde descubrir la fauna de las montañas o el Ecomusèu Çò de Joanchiquet, prototipo de casa tradicional aranesa.