Bosque de Garciaz
Extrañamente poco conocido, el bosque de Garciaz, uno de los parajes más bellos de la comarca debido a su biodiversidad, se esconde entre las elevaciones de las Villuercas y la penillanura Trujillana, a las afueras de Garciaz (Cáceres).
Bello, espectacular en su mescolanza de bosques de castaños, robles melojos y pinos, para llegar hasta el bosque de Garciaz, lo suyo será recorrer una ruta que, en dirección a la ermita de la Caridad, sale, por una calzada empedrada, desde la misma plaza Mayor del pueblo de Garciaz. Así, entre parcelas plantadas de olivo, el viajero accede, casi sin querer, a un hermoso y fotogénico paisaje en el que los robles van sucediendo a los castaños, sin solución de continuidad.
Caminando, caminando se llega al pantano de Maruelos, se prosigue por un bonito y empinado sendero que, entre castaños, aupa al caminante hasta los 1128 metros. Cuando se llegue hasta allá arriba, uno no podrá por menos que felicitarse de haberse regalado el pequeño esfuerzo. Y es que desde la atalaya recién alcanzada la vista se perderá por una panorámica sensacional de pueblitos y pantanos que se extienden a nuestros pies.