Kaiku, recipiente navarro para hacer quesos

Poco se conoce del origen de la palabra euskera Kaiku, un recipiente que los pastores navarros y vascos han utilizado para recoger la leche que se ordeñaba para, posteriormente, hervirla y preparar cuajadas. Hecho de madera de abedul, se cocía en él la leche pero, evidentemente, no se ponía sobre el fuego. El truco consistía en introducir, en el interior del recipiente, piedras muy calientes en volumen y número suficientes como para conseguir que la leche entrara en estado de ebullición. Curiosamente, en el País Vasco también se tuvo la costumbre de meter, por ejemplo, un clavo ardiendo en el agua que se iba a beber, quizá como una forma de desinfectarla.

Según algunos autores, esta técnica habría nacido en tiempos del Paleolítico Superior, cuando nuestros antepasados aún no habían descubierto ningún tipo de cerámica resistente al fuego (curiosamente tanto pueblos indios del Canadá como habitantes de la Siberia Rusa también emplean parecidos métodos de cocción). En cuanto al uso de la madera de abedul, hay que tener en cuenta que el kaiku era utensilio de pastores, oficio éste poco amigo, por su ser trashumante, de objetos pesados o frágiles