Centro de Pamplona

La ciudad de Pamplona se extiende en un recodo del río Arga, un afluente del Ebro, en el centro de una depresión montañosa y en un cruce de caminos entre el Cantábrico y el Mediterráneo, entre la frontera francesa y la meseta castellana.

La ciudad conserva de esa condición histórica un rico patrimonio cargado de influencias que, en algunos aspectos, ha convertido al centro de Pamplona en un lugar único en el que disfrutar de una arquitectura civil, militar y religiosa originales.

En el centro de Pamplona, una de las mejores zonas de hoteles y apartamentos, no hay que dejar de ver la catedral gótica y su portada neoclásica del arquitecto Ventura Rodríguez, así como las iglesias de San Saturnino y San Nicolás y el conjunto de la Cámara de Comptos Real, de origen medieval.

El edificio del Palacio de Navarra, también en el centro de Pamplona, es sede de la Cámara Regional y el del ayuntamiento es el más retratado de toda la ciudad porque de él sale el chupinazo que anuncia el comienzo de los Sanfermines.

Pamplona es también una ciudad de plazas y de parques muy cuidados, algunos con árboles centenarios como los Jardines Sarasate, los de La Taconera, el de la Medialuna, el de Tejería o el de Yamaguchi, de influencia japonesa. En la Plaza del Castillo se pueden encontrar hoteles y apartamentos y en los Jardines de Sarasate hay una colección completa de esculturas de reyes navarros procedentes del Palacio Real de Madrid.

A Pamplona hay que ir también a degustar los pintxos, tapas de tortilla de patata, de embutidos de la tierra, que se arman con toda suerte de originales combinaciones. Pintxos que ofrecen los bares y las barras de los restaurantes de su casco antiguo. Unos establecimientos que compiten entre sí anualmente por ostentar la consideración de mejor bar o restaurante de pintxos.

La unión de buenos alojamientos en el centro de Pamplona, en hoteles y apartamentos, y las excelencias de una buena gastronomía local es la combinación para disfrutar de lo mejor de Pamplona.

Para conocer Pamplona, y hacerlo en tiempo de fiestas, es necesario reservar el alojamiento con suficiente antelación. El centro de Pamplona es lo mejor de una ciudad amable y tranquila con alojamientos de calidad.