​Arles

​Arles es una ciudad situada en el sur de Francia que posee un rico pasado histórico fruto del cual se encuentran una gran variedad de monumentos de gran importancia. Un lugar tranquilo que llamó la atención del mismísimo Van Gogh que en 1888 decidió trasladar su residencia a estas tierras francesas.

Esta ciudad fue fundada por los griegos en el siglo VI a.C siendo su primer nombre Theline. Durante la segunda mitad del siglo I a.C. la ciudad prospera de una forma importante y es en este momento de la historia cuando decide apoyar a Julio César en su guerra contra Pompeyo que le valió el título de colonia. Durante la Edad Media la ciudad se encontraba en medio de algunas de las rutas comerciales más importantes de la época, valiéndole otro momento de gran importancia en la historia.

Qué ver en Arles

Para comenzar la visita de esta ciudad francesa un punto de partida estupendo es la Plaza de la República. Es la sede del ayuntamiento y se encuentra en el epicentro de Arles. Aquí pueden encontrarse algunos de los monumentos más importantes. En el centro de la plaza puede contemplarse el obelisco que antiguamente formaba parte del circo romano de la ciudad. También en esta plaza se encuentra la Catedral de San Trófimo un edificio con fachada románica que constituye un verdadero referente de la arquitectura mundial. En su portalada se puede contemplar un relieve que explica el apocalipsis. El claustro de San Trófimo es otro de los monumentos más relevantes de esta ciudad francesa por su delicada belleza y sus columnas culminadas con capiteles finamente decorados.

Otro de los monumentos que ningún visitante de la ciudad debe perderse son los criptopórticos, unas estructuras que se construyeron por debajo del Foro Romano. Son estancias oscuras y húmedas que en otra época podrían haberse empleado como almacén o para el encarcelamiento de esclavos.

El Teatro y el Anfiteatro romano son puntos claves de la ciudad. El Teatro fue construido en el último tercio del siglo I a.C como reconocimiento por los servicios prestados a Roma. Muy cerca de este lugar se encuentra el Anfiteatro uno de los monumentos más impresionantes. Se conoce con el nombre de Arenas y podría albergar hasta a 25000 espectadores donde se celebraban luchas de gladiadores. A diferencia de los anfiteatros romanos, en este caso cuando uno de los gladiadores hería de forma importante al otro se daba por terminado el combate, evitándose la muerte de ambos durante el espectáculo.

Qué hacer en esta ciudad francesa

Debido a la gran riqueza cultural que posee esta ciudad una de las mejores actividades que se pueden realizar durante la estancia en la misma es visitar el museo departamento del Arles antiguo. Se puede llegar a este museo dando un agradable paseo a orillas del río Ródano permitiendo a sus visitantes contemplar unos de los museos arqueológicos más bonitos del mundo. En su interior se puede contemplar una de las colecciones más importantes del arte romano entre los que se encuentran sarcófagos de diversas épocas, un busto de Julio César o una colección de mosaicos.

Dónde dormir

Visitar esta ciudad francesa es un verdadero placer para los amantes de la cultura y la historia y no hay nada mejor para descubrir un lugar que realizar desplazamientos a pie. Para ello, es fundamental contar con un alojamiento situado en una zona céntrica que haga posible llegar a los puntos de mayor interés con sencillos trayectos. Un hotel o un hostal cerca de la Plaza de República resulta una elección muy interesante en este sentido.

Traslados

Para llevar a cabo el traslado desde el aeropuerto hasta el centro de la ciudad una opción muy interesante es hacer uso del servicio de alquiler de vehículos con conductor que permite a los turistas

llegar a cualquier destino de una forma sencilla y cómoda. También es posible contar con un vehículo con el que moverse con mayor libertad.

Para desplazarse por esta ciudad una opción muy interesante es hacer uso de una de las rutas en minibús disponibles. Una forma de ahorrar tiempo durante el viaje que permite descubrir los puntos de mayor interés del lugar. También es posible contar con un vehículo de alquiler.

Otros datos de interés

Uno de los grandes atractivos de las tierras francesas es su gastronomía. En Arles se pueden encontrar restaurantes muy interesantes donde saborear los platos típicos del lugar y dejarse llevar por la tradición y la cultura de este país.