​Nairobi

Quien viaje a Nairobi no puede esperar de ella edificios históricos de siglos de antigüedad. Y es que la capital de Kenia se fundó en 1899 como depósito ferroviario entre Uganda y Mombasa. Nada hacía prever que poco más de un siglo después, esta urbe sería una de las más habitadas de toda África Oriental, siendo un estandarte moderno, lleno de vida cultural y económica. Es una ciudad de contradicciones en la que hay extremos tanto de lujo como de pobreza, por eso es mejor viajar con la mentalidad de que en nuestro viaje nos vamos a encontrar de todo, desde hoteles de cinco estrellas a barriadas, desde discotecas modernas a bares de carretera, desde todoterrenos a bicicletas.

Al pasear por sus distritos del centro veremos la mezcla de lo de europeo y lo africano, un combo que crea un ambiente único. Además, en Nairobi se respira una atmósfera cosmopolita a la que se suman también un gran número de vecinos de procedencia asiática, creando un batiburrillo de acentos que enriquecen el lugar. Caminar por su mercado entre telas de colores, especias y artesanía puede ser una buena manera de adentrarse en la mezcla étnica que nos espera en el continente.

El espacio más visitado de Nairobi es el Parque Nacional de Nairobi, a escasos 7 kilómetros del casco urbano. Con sus 120 kilómetros cuadrados es el hogar de las especies africanas más valoradas entre las que destacan las cebras, las jirafas masai, los búfalos, los rinocerontes negros, los leones, las panteras, las hienas... Hay varias zonas en el parque donde descansar a la sombra y senderos para pasear, pero lo más habitual es visitarlo en un coche para verlo de manera más sencilla, segura y cómoda. La imagen de los animales con los rascacielos de fondo es muy llamativa y protagoniza muchas de las fotografías de los viajeros. Muy cerca, hay otro santuario para los amantes de los animales. Se trata del orfanato de Elefantes David Sheldrick, un lugar donde se recogen a estos mamíferos. Se creó en 1977 para cuidar a estos animales cuando eran abandonados y necesitaban adaptarse de nuevo a la vida salvaje. Cuando se logra se les devuelve la libertad en el Parque Nacional Tsavo. A primera hora de la mañana es la mejor hora para ir, ya que es cuando los cuidadores les dan la comida y les ayudan a bañarse. A estos lugares se añade el Giraffe Center, otro centro de cuidados, esta vez para jirafas, en el que se puede interactuar con ellas para conocer más sobre su hábitat y forma de vida y, además, se puede ayudar en su conservación.

Otro de los emplazamientos más visitados en Nairobi es la Casa Museo Karen Blixen, escritora danesa que inspiró el blockbuster de “Memorias de África”. Aparte de conocer la historia de la autora y su vida en África, el museo ejemplifica la presencia europea en el continente. También interesante es el Museo Nacional de Nairobi, donde se puede disfrutar de una vasta colección de objetos y obras de arte africano que se recopilan en el lugar desde 1911.

Desde Nairobi se pueden realizar más excursiones por Kenia para descubrir la naturaleza salvaje del país, acercándose a lugares como la Reserva Natural de Maasai Mara, donde disfrutar de un safari durante varios días- además allí se puede ver la Gran Migración con la llegada de la estación seca; el Parque Nacional Amboseli, un imprescindible para todo viajero que pise el país o el Parque nacional Lago Nakuru.