Fátima

La ciudad de Fátima se encuentra en la región central de Portugal, entre Oporto y Lisboa. Esta ciudad era hasta 1997 un pueblo, que ha visto cómo un acontecimiento cambió por completo su historia. En el año 1917 en Cova da Iria dentro de esta parroquia, ocurrió un auténtico milagro. Tres jóvenes pastores llamados Jacinto, Francisco y Lucía vieron cómo se les aparecía la Virgen el 13 de mayo. Estas apariciones se sucedieron el mismo día en diferentes meses hasta octubre. La iglesia no reconocería el fenómeno hasta 1930, cuando el lugar comenzaría a hacerse famoso. Hoy en día hay incluso varias rutas de peregrinación para llegar a la ciudad, el Camino del Tajo, el Camino del Norte, el Camino de Nazaré y el Camino de la Costa.

El principal atractivo turístico de Fátima es sin duda su bello santuario, erigido en honor a las apariciones de la Virgen. En el santuario se puede ver su basílica con la gran torre, la famosa Capilla de las Apariciones, que es en donde se apareció la Virgen a los pastores, y la iglesia de la Santísima Trinidad. En la ciudad también se puede visitar el Museo de Cera o el Museo de Arte Sacro y Etnología. A unos dos kilómetros se encuentra la pequeña localidad de Aljustrel, que fue en donde nacieron los pastores, una visita imprescindible para quienes deseen reconstruir toda la historia de la ciudad.

Una de las principales actividades que se realiza en Fátima consiste en rendir culto a la Virgen en el santuario, especialmente los días 12 y 13 de cada mes. Cerca de la ciudad se encuentra el Parque Natural de las Sierras de Aire y Candeeiros, un buen lugar para desconectar y hacer rutas de senderismo. Cerca del Rio Maior se pueden ver las salinas, con las técnicas de extracción de sal. Además, dentro del parque hay varias grutas y cuevas para los amantes de la espeleología, como las Grutas de San Antonio o Mira d'Aire.

El alojamiento en la ciudad de Fátima es muy variado, con hoteles de hasta cuatro estrellas equipados con algunos lujos, tales como la piscina o un spa. En la localidad es posible alojarse en algún moderno hotel, así como en un económico hostal o en amplios apartamentos que ofrecen total privacidad. Otra posibilidad consiste en alquilar algunas casas rurales en las afueras, en un entorno mucho más tranquilo. La gran mayoría de alojamientos se encuentran alrededor de la zona del santuario, que es sin duda el principal atractivo de la ciudad.

La mejor forma de llegar a Fátima es por carretera, ya que por la ciudad pasa la autopista A1, la que va de Oporto a Lisboa. Es posible llegar fácilmente con un coche de alquiler, ya que hay una salida que lleva al santuario. Por otro lado, una buena opción es la de utilizar el transporte público, con líneas de autobuses que llevan a la estación situada a pocos metros del santuario. Opera en la zona principalmente la Red Expressos. El aeropuerto internacional más cercano es el de Lisboa, situado a 121 kilómetros.

En la ciudad de Fátima se puede probar lo mejor de la gastronomía portuguesa. Los platos con bacalao son la gran especialidad, pero también cuentan con quesos con denominación de origen. El caldo verde o las francesinhas son otros de los platos típicos que hay que tomar en la localidad. En cuanto a las fiestas, el 12 y el 13 de mayo son los días más importantes en la ciudad, pues se celebra el aniversario de las apariciones.