Cambrils ha sido siempre uno de los lugares más emblemáticos de la Costa Dorada y no nos extraña. Este pequeño pueblo marinero ha sabido adaptarse a los nuevos tiempos sin renunciar a su carácter e historia. Es por eso que al pasear por Cambrils aún se disfruta de lugares auténticos, de sabores de siempre y de vecinos de toda la vida. Esos ingredientes se combinan con el turismo que llega hasta sus playas de arena fina. El Mediterráneo pone el telón de fondo a este municipio, ideal para familias que deseen una estancia llena de actividades y buenas playas. Igualmente su ubicación cerca de Port Aventura, Salou y Tarragona es un incentivo más para decantarse por este destino este año.
El municipio catalán es elegido por muchas familias para pasar unas vacaciones divertidas. Cambrils cuenta con la marca Destino de Turismo de Familiar desde el año 2007, un sello de calidad otorgado por la Generalitat de Catalunya que lo reconoce como un destino para niños y mayores. Por eso es muy fácil encontrar hoteles para niños en Cambrils, ya que muchos de los que hay están equipados para albergar familias y sus instalaciones incluyen habitaciones familiares, piscinas adaptadas, animación, cambiadores de pañales, sillas para comer, miniclubs, parques infantiles... Incluso en Cambrils existe un sistema por si un niño se pierde. Se trata de un brazalete identificativo que se reparte en los hoteles con sello de Destino de Turismo Familiar para que lo puedan llevar los niños durante las vacaciones con sus datos por si se despistan.
Uno de los grandes atractivos de Cambrils son sus playas. Dispone de 9 kilómetros de costa en los que se pueden descubrir hasta 10 playas diferentes. Son playas de calidad, seguras, sin grandes corrientes, preparadas para acoger a todo tipo de bañistas, tengan la edad que tengan. Una de las más conocidas es la playa del Regueral, bordeada por el paseo marítimo de Cambrils. Cuenta con 1.300 metros de longitud, en los que no faltan los servicios. Se localiza junto al Club Naútico – otro indispensable de Cambrils- y desde allí se extiende con un sinfín de propuestas, incluido un castillo hinchable en los meses de verano, pistas de volley playa, empresas que alquilan kayaks... Eso sí, tiene un nivel de ocupación alto.
Entre todas las playas destacan las playas que cuentan en su haber con Bandera Azul. Una de ellas es la Playa de la Llosa, que disfruta de una peculiar forma de M y junto a la cual podemos descubrir ruinas romanas. Esta playa es urbana y está llena de servicios. La playa del Cavet está menos transitada que otras playas de Cambrils, por lo que es una buena opción para aquellos que buscan más tranquilidad. Es semiurbana y con aguas tranquilas, disfrutando también de Bandera Azul. Está compuesta por arena y piedrecillas y, además, cuenta con una escuela de surf, por lo que los más aventureros podrán iniciarse en este deporte. Igualmente interesante es la playa de l'Ardiaca, situada al sur del municipio, alejada de las zonas más turísticas del centro, pero aún así en temporada alta, hay que ir pronto para coger sitio. A ellas se unen igualmente la playa del Esquirol, donde además de relajarse en la arena, uno puede tomar clases de vela o probar sus habilidades haciendo paddle surf, o la playa de El Dorado, en la que sus espigones crean espacios seguros y poco profundos para el baño.
Más que playa
Cambrils es una localidad con pasado. De hecho se tiene constancia de su existencia desde la Prehistoria. Para conocer la ciudad, lo mejor es pasear por sus calles para ir descubriendo los vestigios que van desde la época romana a la actual, pasando por el periodo medieval o moderno. Uno de los monumentos más llamativos es la Torre del Puerto, del siglo XVII, que servía para defender la ciudad de los ataques por mar de los piratas. Está en el Paseo Marítimo junto al puerto pesquero, uno de los enclaves que definen Cambrils. No hay que dejar de caminar por esta parte y, además, si es a eso de las 17:00 – menos en mayo y en junio- se verá la llegada de las barcas de los marineros que regresan a puerto. Existen también empresas que organizan excursiones en barcos de pesca para saber cómo trabajan los marineros de la zona, una experiencia divertida para niños y adultos para aprender más sobre este oficio.
En la zona del puerto y en el casco de Cambrils se encuentran también un gran número de restaurantes donde probar la gastronomía local, que hunde sus raíces en la tradición marinera y en la huerta de los alrededores. No hay que dejar de probar recetas tradicionales como el suquet de pescado, el arroz negro o los fideos rossos, entre otros muchos. En Cambrils existen también dos restaurantes con una estrella Michelín: Can Bosch y Rincón de Diego, para aquellos que quieran darse un capricho durante las vacaciones.
A todo ello hay que sumar sus comunicaciones. Está muy bien conectada por carretera gracias a la AP-7, la N-340 y la A-7, pero además cuenta con una estación de AVE muy cercana en Camp de Tarragona, estación de tren convencional en la misma localidad, líneas de autobuses y el Aeropuerto Internacional de Reus a escasos 12 kilómetros de distancia.
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