Antalya ya no es un pequeño pueblo de pescadores. La creciente metrópolis turca es un símbolo de vacaciones, sol, mar, y vida agitada de ciudad.
Está rodeada por espectaculares montañas en donde se encuentra la estación de esquí Saklikent. Pero no sólo ofrece maravillosas playas y pistas de esquí, sino que también encontramos en la región muchos monumentos histórico-culturales, ya que en los siglos pasados la ciudad estuvo bajo el mando de distintos poderes, y su pasado se puede apreciar claramente en el casco viejo, con sus callejuelas y la muralla de la ciudad. Desde aquí hay una vista única del puerto deportivo y de la Sierra de Taurus.
Hoy en día Antalya es un importante centro turístico a nivel internacional gracias a esa combinación tan especial que comentábamos anteriormente. Algunos de los lugares que bien merecen una visita son el casco antiguo de Antalya, llamado Kaleiçi, que guarda un encanto especial y parece sacado de otra época debido a sus estrechas calles y edificios de estilos turcos y griegos. A día de hoy está lleno de puestos, tiendas, bares y restaurantes y resulta muy agradable pasear por sus calles.
Aquellos viajeros que busquen una escapada a la playa, podrás disfrutar de las aguas de las playas de Konyaaltı, Lara y Karpuzkaldıran, donde exiten gran cantidad de hoteles y resorts pensados para el turismo.