Croacia está de moda. Este país se ha convertido en un reclamo gracias a su costa, su historia, su idiosincrasia y por qué no decirlo, por el empujón que le ha dado aparecer como escenario en Juego de Tronos. Este país, antiguo miembro de Yugoslavia, es un destino agradable en el que se puede combinar playa, patrimonio, naturaleza y comida.

Se necesitan varios días para conocer los puntos más interesantes de Croacia. Para nosotros, una semana será suficiente para ver lo más importante. Para aprovechar el tiempo podéis empezar en Dubrovnik, al sur, y acabar en el norte, en Pula. Para moveros, lo mejor es alquilar un coche, pero ojo, tened cuidado porque a veces abusan de los precios. Así que antes de contratar, consultad varias agencias de alquiler de coches en Croacia.

Día 1: Dubrovnik

En temporada alta es un lugar atestado de viajeros, así que lo mejor es madrugar para evitar tanto a la multitud como al calor croata del mediodía. Merece la pena exprimir el tiempo para ver todo el patrimonio que se encierra en las murallas, declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO desde 1979. Si sois fans de la serie antes citada, podéis conocer sus escenarios recorriendo el Desembarco del Rey. En Dubrovnik, prepararos para andar para recorrer sus más de 2 kilómetros de murallas, para subir las escaleras de las calles perpendiculares a la calle Stradun, para acercaros a la Catedral, a la fortaleza de Lovrijenac, al Puerto viejo... Pero si es bonito el interior, el exterior lo es más. Así que aprovechad para ver Dubrovnik desde lejos subiendo a su teleférico que se puede coger cerca de las murallas y que lleva a una colina cercana donde no sólo observaréis la ciudad, sino también los bellos atardeceres sobre el Mediterráneo.

Día 2: Escapada a Mostar

No es Croacia, pero está muy cerca de Dubrovnik y es una interesante parada que se puede realizar en el viaje hacia Split. Mostar pertenece a Bosnia y es uno de los lugares que sufrió más de cerca la guerra de los Balcanes. En Mostar lo más representativo es el puente reconstruido, que se ha convertido en el símbolo de la ciudad y en una metáfora que habla de unión. Si os atrevéis, podéis daros un baño en el río, pero el agua suele estar muy fría en todas las épocas del año. Antes de ir, tenéis que saber que en la frontera habrá que esperar un rato para pasar el control de pasaportes. Tampoco dejéis de probar su rica gastronomía.

Día 3: Split

Es otra de las joyas que esconde Croacia. Su casco histórico merece la pena ser recorrido a conciencia para conocer lugares como el Palacio de Diocleciano, una ciudad dentro de la ciudad, así como la zona del Paseo Marítimo con sus edificios renacentistas. Se nota la influencia italiana en su arquitectura que crea un ambiente muy agradable para disfrutar de sus callejuelas. Si tenéis ganas de ver un museo podéis acercaros hasta el Museo Arqueológico, fundado en el siglo XIX.

Día 4: Zadar

En Zadar se puede combinar la cultura con la playa y es que esta localidad de la costa de Dalmacia puede ofrecer de todo a sus visitantes. Además, es menos conocida que las ciudades anteriores, por lo que es probable que encontréis menos turistas y estéis más tranquilos. Uno de los lugares más llamativos, además de su parte histórica, es el llamado Órgano de Mar, un monumento de escaleras construido en 2005. El mar y su propia construcción hacen que las olas que entran formen sonidos bien curiosos y un ambiente de relax.

Día 5: Lagos Plitvice

Es un paisaje que merece la pena ver. El Parque Nacional de los Lagos de Plitvice se ubica en la región de Lika. Está declarado como Patrimonio de la UNESCO gracias a sus 33.000 hectáreas de naturaleza pura. Su paisaje tipo kárstico se entremezcla con los más de 800 lagos de la zona. La vegetación hace además que esos lagos tengan diferentes tonalidades que crean un paisaje de fantasía y ensueño. También hay cascadas y hayas. El horario del parque es de 7:00 a 19:00, así que si queréis aprovechar la visita, es aconsejable que madruguéis.

Día 6: Zagreb

Muchos viajeros que visitan Croacia no paran en Zagreb y a nosotros nos parece un gran error. Esta ciudad tienen un encanto que se descubre paseando por su casco. Su grandeza ha quedado patente en su arquitectura que invita a calzarse unas buenas botas para subir hasta la parte más alta. No os debéis perder la pintoresca Iglesia de San Marcos, la Catedral, el Mercado Dolaj, la calle Tkalčića o la zona de la Lotrščak Tower. Si tenéis tiempo, un lugar muy original es el Museo de las Relaciones Rotas, donde cientos de enamorados han participado para montar una exposición de desamores, traiciones y esperanzas.

Día 7: Pula

Se acaba nuestro tiempo en Croacia y lo hace en hermosa ciudad del norte, ubicada en Istria y cuyo pasado se lee en lugares como su anfiteatro, el foro romano y el templo de Augusto, el Arco del Triunfo de los Sergios, el Palacio Comunal de época renacentista o el Mosaico del castigo de Dirce. Este lugar apasionará a los amantes de la cultura. Si os sobra tiempo, acercaros hasta la zona de playa de Verduela para daros un baño de despedida del Mediterráneo.

Seguro que el viaje se hace corto, así que para la próxima haremos un viaje por las islas croatas, una experiencia que también es muy interesante.

Reserva ahora tu viaje a Croacia al mejor precio garantizado con las ofertas y precios especiales que te ofrecemos en Centraldeservas.com. La más amplia y variada oferta de hoteles en Dubrovnik, Mostar, Split y principales ciudades que ver en Croacia para sacar el máximo partido a tu viaje. ¿Nos vamos?

.